viernes, 5 de enero de 2018

Epifanía del Señor.


Jesús se manifiesta ante los hombres


Cada 6 de enero la Iglesia Católica celebra la Epifanía del Señor, lo que en la colectividad se conoce mejor como el día de Reyes. Es una celebración importante para los católicos pues en el tiempo de navidad que aún no culmina nos muestra cómo Jesús se revela ante los hombres como Rey y Señor.

En la navidad celebramos al Hijo de Dios hecho hombre. Su encarnación como hombre en el vientre de María Santísima su madre. En la fiesta de la Epifanía celebramos su “Revelación”. El Dios que se abaja y nace en un humilde pesebre también se manifiesta a los hombres representados por los tres Reyes de Oriente.

Los Reyes buscaban a Jesús para rendirle los honores de un Rey, incluso al llegar a Jerusalén preguntan:

“¿Dónde está el rey de los judíos recién nacido? Nosotros hemos visto aparecer su estrella y venimos a adorarlo.” (Mt. 2,2)

Los tres Reyes ya sabían del nacimiento de Jesús y le buscaban, incluso sabían que la estrella les guiaba a su encuentro y que como se había anunciado por los profetas nacería en Belén de Judá. Ellos llegan a donde se encuentra el niño y le rinden los honores de un Rey pues como tal le reconocen.

Ahora bien, Dios se ha manifestado, Jesús se revela como rey. ¿Qué impacto tiene esto en nuestras vidas? Nos encontramos ante un Dios que hace a un lado todo su poder para nacer humildemente en un pesebre, un Dios que se hace hombre para vivir junto a nosotros y enseñarnos a amar, un Dios que se revela, que se manifiesta desde el pesebre como Rey pero no un rey de la nobleza tradicional sino el rey de los cielos, un rey de un espacio y tiempo espiritual que aún no alcanzamos a comprender.

En este punto vale la pena preguntarnos ¿Quién es este Dios en nuestras vidas? ¿Quién es Jesús para mí?


Estamos a un día de culminar el tiempo de navidad. Venimos de celebrar el nacimiento del niño Dios, luego la maternidad divina de María Santísima y ahora la Epifanía del Señor. Mañana celebraremos el Bautismo del Señor y entre tantas fiestas puede que aún en nuestras vidas no le hallamos dado a Jesucristo el lugar que realmente merece, ese lugar de honor como Rey y Señor de nuestras vidas, ese lugar que le reconocieron los pastores y los reyes cuando aún se encontraba en el pesebre. 


En el pesebre de nuestros corazones ¿habita realmente Dios? ¿Hemos visto junto a los reyes su poder? ¿Le reconocemos verdaderamente como Dios?

Hoy vale la pena detenernos unos minutos y meditar: Ha pasado diciembre ¿ha sido mi celebración navideña una celebración del amor? ¿Estuvo realmente Jesús en nuestra mesa en la cena de noche buena? ¿Celebramos a Jesús o lo hicimos a un lado?


Jesús se manifiesta ante nosotros pero no para recibir honores materiales que nunca ha querido, ni vacíos títulos de nobleza. Se manifiesta esperando de nosotros una sola cosa, una única respuesta, que le reconozcamos como el Rey de nuestras vidas y sea en función a Él que encaminemos siempre nuestros pasos.

Este sábado 6 de enero celebraremos la Epifanía del Señor en nuestro Templo Parroquial en la celebración eucarística a las 6:00 pm. ¡Acompáñanos!

María Luisa Angarita
Pastoral de Medios de Comunicación
Parroquia “La Resurrección del Señor”.

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